Sam Altman mira hacia una “moneda global que está fuera del control de cualquier gobierno”
El jefe de OpenAI, Sam Altman, ha calificado a bitcoin como el siguiente paso "súper lógico" para el progreso tecnológico, pocos meses después de lanzar su propia criptomoneda.
Altman, cuya compañía lanzó el asistente viral de IA ChatGPT el año pasado, hizo estos comentarios en una aparición reciente en el podcast The Joe Rogan Experience, durante el cual también lamentó el papel de la regulación gubernamental en el criptoespacio.
"La guerra contra las criptomonedas... eso me entristece mucho por el país", dijo Altman.
"Creo que la idea de que tenemos esta moneda global que está fuera del control de cualquier gobierno es un paso muy lógico e importante en el árbol tecnológico".
El precio de bitcoin cayó drásticamente en 2021 y 2022, impulsado en gran medida por el colapso del intercambio de cifrado FTX. Desde entonces, la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. ha presentado demandas contra otras bolsas como Binance y Coinbase como parte de una ofensiva contra la industria.
La senadora Elizabeth Warren también presentó un proyecto de ley sobre criptomonedas en un intento de abordar "el uso de las criptomonedas en el lavado de dinero, el tráfico de drogas y la financiación del terrorismo y las naciones rebeldes".
El jefe de OpenAI habló brevemente sobre su propio proyecto de criptomonedas, llamado Worldcoin, que ha enfrentado varias controversias desde su lanzamiento oficial en julio.
El proyecto implica recopilar datos biométricos de las personas a través de un orbe de escaneo del iris a cambio de una parte del token criptográfico WLD.
La idea es utilizar los datos para verificar la "personalidad única" de cada individuo a fin de garantizar que nadie pueda reclamar más de la parte asignada de la criptomoneda.
Los criptocomentaristas han calificado este enfoque único de “extravagante” y “revolucionario”, y algunos han advertido que la naturaleza sensible de los datos significa que podrían ser explotados por actores nefastos.
Los reguladores de varios países, incluidos Francia y Alemania, están investigando las operaciones de Worldcoin para ver si violan las prácticas de seguridad de los datos.
Worldcoin ha reconocido las preocupaciones sobre la privacidad y señaló en una publicación de blog en agosto que "todo es opcional" y que no es necesario vincular información personal al escaneo del iris.