Si observa el libro de pedidos anterior, puede ver que la oferta más alta ($22,346) y la demanda más baja ($22,347) no son lo mismo. Más bien, hay una brecha de un dólar. Esta brecha se llama diferencial entre oferta y demanda. Para ponerlo en términos comerciales, el diferencial entre la oferta y la demanda es la brecha entre la oferta más alta y la demanda más baja en el libro de órdenes. Dicho de otra manera, es la diferencia entre el precio mínimo al que alguien está dispuesto a vender un activo y el precio máximo al que alguien está dispuesto a comprar ese activo.

En la mayoría de los intercambios de cifrado, el diferencial entre oferta y demanda se reduce a la dinámica de la oferta y la demanda en la cartera de pedidos, y el diferencial es generalmente bastante ajustado. En estos intercambios, el diferencial entre oferta y demanda aún podría expandirse de vez en cuando, especialmente cuando el mercado se comporta de manera errática o la incertidumbre es alta y, como resultado, la liquidez se agota.

En mercados de alto volumen, el diferencial entre oferta y demanda es generalmente menor, mientras que los mercados de menor liquidez tienen un diferencial mayor. Esto se debe a la falta de competencia entre compradores y vendedores: cuantos más participantes, más ajustados son los diferenciales.

Existen numerosos recursos disponibles que monitorean el diferencial promedio por intercambio o incluso par comercial, pero también puede calcular el diferencial usted mismo. Simplemente reste el precio de oferta más alto del precio de venta más bajo. Por ejemplo, si la oferta más alta en Ethereum es $1570 y la demanda más baja es $1570,50, el diferencial es de 50 centavos.

¿Por qué es importante el diferencial entre oferta y demanda para el comercio de criptomonedas?

El diferencial entre oferta y demanda puede tener un gran impacto en sus operaciones, especialmente durante períodos de tiempo más largos. Estas pequeñas diferencias entre los precios de compra y venta reducen su potencial de ganancias, ya que compra a precios más altos y vende a precios más bajos de lo que sería ideal. Cada transacción consume una pequeña porción de sus ganancias, lo que, con el tiempo, equivale a una cantidad considerable de dinero. Veamos un ejemplo.

Imagine que está negociando una moneda imaginaria "ABC", donde el precio justo de mercado es de 0,35 dólares y el diferencial es de 0,02 dólares. En esta situación, compras ABC al precio de venta más bajo de 0,36 dólares. En este momento, su mejor opción disponible para vender ABC es $0,34 (precio de oferta más alto). En otras palabras, el precio tendrá que subir dos centavos enteros, o aproximadamente un 5%, para poder alcanzar el punto de equilibrio.

Especialmente cuando se opera con alta frecuencia, el diferencial entre oferta y demanda realmente puede afectar su rentabilidad.