Según U.Today, Shiba Inu (SHIB) está experimentando una importante caída debido a que el volumen de transacciones de las ballenas se ha desplomado a niveles preocupantes. En las últimas 24 horas, solo se registraron 16 grandes transacciones por un total de 392.050 millones de SHIB, lo que supone una disminución sustancial con respecto a los niveles de actividad anteriores. Esta repentina caída indica que los principales inversores, a menudo conocidos como ballenas, se están retirando de SHIB y reduciendo su exposición al token. El análisis de los datos on-chain revela una tendencia general de disminución del interés por parte de participantes significativos en el ecosistema SHIB. La diferencia entre el mínimo reciente de 24 horas y el máximo de siete días de 45 grandes transacciones destaca la creciente inactividad de las ballenas. Esta falta de actividad es preocupante para SHIB, ya que sugiere que las inversiones sustanciales en el mercado de las monedas meme ya no se consideran atractivas. Un análisis detallado del indicador global In/Out of the Money muestra que, actualmente, el 45,46 % de los titulares de SHIB son rentables, mientras que el 52,79 % no lo son. El hecho de que un número significativo de inversores esté incurriendo en pérdidas al precio actual, que ronda los 0,000013 $, reduce aún más la confianza en el rendimiento potencial de SHIB. La preocupación por la sostenibilidad a largo plazo de SHIB está creciendo debido a la falta de actividad de las ballenas y la percepción negativa general del token. El estancamiento de SHIB podría ser una señal temprana de futuras caídas, incluso cuando otros activos del mercado siguen mostrando una actividad robusta. En el clima actual del mercado, Shiba Inu podría enfrentar dificultades a menos que un catalizador importante impulse la demanda o que un gran número de inversores muestre un renovado interés. La pregunta crucial sigue siendo si SHIB podrá superar estos tiempos difíciles y restablecerse como un actor importante en el mercado de las monedas meme o si las ballenas seguirán perdiendo interés. Según los datos disponibles, parece que podrían producirse nuevas caídas inminentes si persiste el patrón de bajos volúmenes de transacciones.