¡Con cuidado! Mucho texto.

Internet está en constante evolución e innovación. Ya hemos visto las dos generaciones anteriores, Web 1.0 y 2.0, y estamos ansiosos por ver qué traerá la Web 3.0. La experiencia Web 1.0 era estática y carecía de la capacidad de crear sus propios sitios con contenido rico como lo hacemos hoy. La Web 2.0 unió a los usuarios a través de redes sociales y sitios dinámicos, sacrificando al mismo tiempo la descentralización.

El concepto Web 3.0 promete proporcionar un control total sobre la información en Internet, así como crear una web semántica que permitirá a los programas percibir y procesar fácilmente el contenido del usuario. La tecnología Blockchain permitirá la descentralización, una identidad digital libre a través de carteras criptográficas y una economía digital abierta.

La forma de interactuar con la web promete volverse más inmersiva gracias a las capacidades de la interfaz 3D. Además, los usuarios esperan una búsqueda de contenido cómoda, publicidad dirigida y una mejor atención al cliente. Algunas de las tecnologías Web 3.0 ya se utilizan ampliamente en asistentes de voz como Siri y Alexa, así como en hogares inteligentes.

Introducción

Internet ha cambiado mucho en los últimos veinte años. Hemos avanzado desde protocolos de capa de aplicación para mensajería en tiempo real (IRC) y pagos digitales simples hasta redes sociales modernas y complejos servicios bancarios en línea. Ya hemos experimentado tecnologías de Internet completamente nuevas, como las criptomonedas y blockchain. Internet se ha convertido en una parte integral de nuestra comunicación e interacción y continúa desarrollándose cada año. Ya hemos visto la Web 1.0 y 2.0, y estamos entusiasmados de ver lo que aporta la Web 3.0. Echemos un vistazo más de cerca a esto.


¿Qué es la Web 3.0?

Web 3.0 (también conocida como Web3) es una tecnología de Internet de próxima generación que se basa en el aprendizaje automático, la inteligencia artificial (IA) y la tecnología blockchain. Este término fue acuñado por Gavin Wood, fundador de Polkadot y cofundador de Ethereum. Mientras que la Web 2.0 se centra en contenido generado por el usuario alojado en sitios centralizados, la Web 3.0 promete brindar a los usuarios un control total sobre sus datos en línea. 

Este concepto tiene como objetivo crear sitios y aplicaciones abiertos, conectados e inteligentes con un análisis de datos de máquina mejorado. La descentralización y la economía digital también son características integrales de la Web 3.0, ya que agregan valor al contenido creado en la web. Es importante señalar que la Web 3.0 es un concepto cambiante. Todavía no tiene una definición única, y por ahora cada uno lo interpreta de forma diferente.


Cómo funciona la Web 3.0

La Web 3.0 entregará rápidamente información personalizada y relevante mediante el uso de inteligencia artificial y técnicas avanzadas de aprendizaje automático. Los algoritmos de búsqueda eficaces y el desarrollo de análisis de datos permitirán que las computadoras comprendan mejor las necesidades de los usuarios y recomienden contenido relevante. La Web 3.0 también se centrará en proteger los derechos de propiedad de los contenidos y apoyar una economía digital accesible.

Hoy en día, los sitios web como foros y redes sociales suelen contener información estática o contenido orientado al usuario. Aunque esta estructura permite publicar información para una amplia gama de personas, es posible que no satisfaga las necesidades de un usuario en particular. Un sitio debe adaptar la información que proporciona a cada usuario individual, similar a lo que sucede en la comunicación humana real. En la Web 2.0, los usuarios pierden la propiedad y el control sobre la información una vez que está en línea.

Otra figura clave del concepto Web 3.0 es el informático y creador de la World Wide Web Tim Berners-Lee. Propuso su visión de Internet del futuro allá por 1999:

“Tengo el sueño de que la web (compuesta por computadoras) pueda analizar todos los datos de Internet, incluidos el contenido, los enlaces y las transacciones entre personas y computadoras. La "Web Semántica" que hace esto posible aún no ha llegado, pero cuando lo haga, la mecánica cotidiana del comercio, la burocracia y nuestra vida diaria serán procesadas por máquinas que interactúan entre sí".

Berners-Lee y Gavin Wood combinaron sus ideas para hacer que el océano de información descentralizada sea más accesible para sitios web y aplicaciones. Analizarán y utilizarán esta información para satisfacer las necesidades de usuarios específicos. Blockchain sirve como una solución para la gestión justa de la identidad, los datos y la propiedad en línea.


Una breve historia del desarrollo de las tecnologías de Internet.

Para comprender mejor el concepto de Web 3.0, recordemos el camino que hemos recorrido y lo que hemos logrado. Ha habido muchos cambios en las últimas dos décadas:

Red 1.0

La primera red de Internet se basó en lo que hoy se conoce como Web 1.0. El término fue acuñado en 1999 por el autor y diseñador web Darcy DiNucci para distinguir entre Web 1.0 y Web 2.0. A principios de la década de 1990, los sitios web se creaban en páginas HTML estáticas que solo podían mostrar información sin permitir a los usuarios editar o agregar nuevos datos. Las interacciones sociales se limitaron a simples chats y foros.

web 2.0

Todo eso cambió a finales de la década de 1990, cuando comenzó a tomar forma el cambio hacia una Internet más interactiva. La Web 2.0 permitió a los usuarios interactuar con sitios web a través de bases de datos, procesamiento del lado del servidor, formularios y redes sociales. Todas estas herramientas han cambiado las interacciones en Internet de estáticas a dinámicas. 

La Web 2.0 se centró en el contenido generado por el usuario y la interoperabilidad de diferentes sitios y aplicaciones. Ofrecía no sólo el consumo pasivo de contenidos, sino también la participación en su creación. A mediados de la década de 2000, la mayoría de los sitios web habían cambiado a la Web 2.0 y las grandes empresas de tecnología comenzaron a crear redes sociales y servicios en la nube.

El futuro y la Web 3.0

Si nos fijamos en la historia del desarrollo de Internet, la evolución de la red semánticamente inteligente resulta ser una etapa natural. Al principio, los datos se presentaban de forma estática, pero con el tiempo los usuarios pudieron interactuar de forma dinámica. Los algoritmos han comenzado a utilizar estos datos para crear experiencias en línea más personalizadas y convenientes. Prueba a entrar en YouTube o Netflix y verás cómo los algoritmos han mejorado estas plataformas.

Si bien no está del todo claro cómo será la Web 3.0, podría utilizar tecnologías peer-to-peer (P2P) como blockchain, software de código abierto, realidad virtual, Internet de las cosas (IoT) y más. La Web 3.0 tiene como objetivo hacer que Internet sea más abierta y descentralizada. Según el marco actual, los usuarios deben confiar en los proveedores de redes y celulares para manejar toda la información que pasa por sus sistemas. Con la llegada de las tecnologías de contabilidad distribuida, este proceso puede cambiar pronto, permitiendo a los usuarios recuperar la propiedad de sus datos.

La siguiente tabla describe las principales diferencias entre Web 1.0, 2.0 y 3.0:


Red 1.0

web 2.0

Web 3.0

Contenido

Absorción pasiva de contenidos

Plataformas comunitarias y contenido generado por el usuario.

Propiedad de tu contenido

Tecnologías

HTML

HTML dinámico, Javascript

Blockchain, IA, aprendizaje automático

Ambiente virtual

No

3D básico

3D, realidad virtual, realidad aumentada

Publicidad

Intrusivos (banners, etc.)

Interactivo 

Orientación basada en las acciones del usuario

Almacén de datos

Los datos se almacenan en el servidor del sitio.

Almacenamiento de datos propiedad de gigantes tecnológicos

Datos distribuidos entre los usuarios.

Audiencia

Usuarios individuales

Comunidades de usuarios 

Usuarios conectados a través de plataformas y dispositivos

 


Características clave de la Web 3.0

La Web 3.0 aún no está completamente terminada, pero ya se conocen sus conceptos básicos. A continuación se presentan cuatro de los aspectos más importantes de la futura generación de la Web 3.0.

Diseño semántico

Cada año, los programas son cada vez mejores en el reconocimiento de datos y contenidos de los usuarios. Sin embargo, todavía estamos lejos de una semántica totalmente comprensible. Por ejemplo, en la comunicación humana, dependiendo del contexto, las palabras con connotaciones negativas pueden usarse en un sentido positivo, pero será increíblemente difícil para un programa entender esto. Para aprender a comprender intuitivamente las comunicaciones de los usuarios en Internet, la IA utiliza big data e información adicional.

Blockchain y criptomonedas

La propiedad de los datos, la economía en línea y la descentralización son aspectos clave del futuro con Web3 de Gavin Wood, que se logrará utilizando un sistema blockchain confiable. La capacidad de cada usuario de tokenizar activos, poner información en la red y utilizar firmas digitales son innovaciones críticas que se adaptarán a la Web 3.0.

Visualización 3D e interactividad.

En pocas palabras, la apariencia de Internet cambiará dramáticamente. Estamos viendo una adopción generalizada de interfaces 3D, que incluso incluyen realidad virtual. El Metaverso es un área que ha brindado a los usuarios este tipo de experiencias, y la comunicación ya está disponible a través de videojuegos 3D. Los campos UI y UX también están trabajando para que la información se muestre con mayor claridad.

Inteligencia artificial

La inteligencia artificial es la clave para convertir el contenido generado por los usuarios en datos que las máquinas puedan entender. Ya estamos utilizando activamente robots de atención al cliente, pero esto es sólo el comienzo. La IA puede proporcionar datos y ordenarlos, lo que la convierte en una herramienta versátil para la Web 3.0. La principal ventaja de la IA es que mejorará al reducir la participación humana en su entrenamiento.


Ventajas de la Web 3.0 respecto a versiones anteriores

Combinar las características clave de la Web 3.0 podría, en teoría, aportarnos una serie de beneficios, pero recordemos que todos ellos dependerán del éxito de la tecnología subyacente:

1. Falta de un punto central de control. Al no haber intermediarios, ningún tercero podrá controlar los datos de los usuarios. Esta libertad reduce el riesgo de censura por parte de gobiernos o corporaciones y también protege contra ataques DoS.

2. Mejorar la interconexión de la información. A medida que aparecen más productos en línea, los paquetes de datos proporcionan a los algoritmos una gran cantidad de material variado para analizar. Esto les ayudará a aprender a proporcionar información más precisa que satisfaga las necesidades de cada usuario individual.

3. Búsqueda más eficiente. Cuando se utilizaban motores de búsqueda convencionales, encontrar los mejores resultados era todo un desafío. Sin embargo, los sistemas han mejorado a lo largo de los años con búsquedas semánticamente relevantes basadas en el contexto y metadatos de consulta. Esto proporciona una clasificación más cómoda de las páginas y una fácil selección de la información necesaria.

4. Publicidad y marketing avanzados. A pocas personas les gusta ser bombardeadas con publicidad online innecesaria. Pero si los banners coinciden con sus intereses y necesidades, pueden resultar útiles y no molestar con su presencia. La Web 3.0 tiene como objetivo mejorar la selección de anuncios a través de sistemas de inteligencia artificial más inteligentes e identificar audiencias relevantes en función de los datos de los consumidores.

5. Atención al cliente mejorada. Cuando se trata de sitios web y aplicaciones, el servicio al cliente es un elemento clave de la experiencia del usuario. Sin embargo, debido a los enormes costos, muchos servicios que tienen éxito no logran escalar sus procesos de atención al cliente en consecuencia. Al utilizar chatbots más inteligentes que pueden comunicarse con varios clientes simultáneamente, los usuarios pueden tener una experiencia superior con los agentes de soporte.


¿Cómo encajan las criptomonedas en la Web 3.0?

Hablando de la Web 3.0, no se puede dejar de notar el enorme potencial de blockchain y las criptomonedas. Las redes descentralizadas han creado con éxito incentivos para una propiedad, una gestión de datos y una creación de contenidos más responsables. Entre los aspectos más importantes para la Web 3.0 se encuentran:

1. Carteras criptográficas digitales. Cualquier usuario puede crear una billetera y realizar transacciones usándola como firma digital. Esto elimina la necesidad de almacenar datos o crear una cuenta con un proveedor de servicios centralizado. El usuario obtiene control total sobre la billetera y puede usar la misma billetera en múltiples cadenas de bloques.

2. Descentralización. Distribución abierta de información y poder a muchas personas que utilizan blockchain. Esto contrasta con la Web 2.0, donde los grandes gigantes tecnológicos dominan muchos aspectos de nuestras vidas en línea.

3. Economía digital. La capacidad de poseer datos en la cadena de bloques y utilizar transacciones descentralizadas crea una nueva economía digital. Esto facilita el uso y el comercio de bienes, servicios y contenidos en línea sin proporcionar datos bancarios o personales. Esta apertura mejora el acceso a los servicios financieros y ayuda a los usuarios a ganar dinero.

4. Compatibilidad. Las DApps y los datos en red son cada vez más interoperables. Las cadenas de bloques creadas con la máquina virtual Ethereum pueden admitir fácilmente las DApps, billeteras y tokens de cada una. Esto facilita la adopción generalizada necesaria para unir la Web 3.0.


Usando la Web 3.0

Aunque la generación Web 3.0 aún está en desarrollo, tenemos varios ejemplos del uso de sus características:

Asistentes de voz Siri y Alexa

Tanto Siri de Apple como Alexa de Amazon son asistentes de voz que satisfacen muchas de las demandas de la Web 3.0. La IA y el procesamiento de voz en vivo ayudan a estos servicios a comprender mejor los comandos de voz humana. Cuanta más gente utilice Siri y Alexa, más rápido se desarrollará su IA y mejorarán sus capacidades de interacción. Estos asistentes son un ejemplo ideal de aplicación web semiinteligente del mundo de la Web 3.0.

Hogares inteligentes

Una de las características clave de la Web 3.0 es la ubicuidad, lo que significa que se puede acceder a datos y servicios en línea desde múltiples dispositivos. La calefacción, el aire acondicionado y otros servicios públicos se pueden ajustar automáticamente dentro de una casa inteligente. Una casa inteligente sabe cuándo sales, cuándo regresas y qué temperatura ambiente te gusta. Podrá utilizar esta información y más para brindarle el mejor servicio automatizado. Puede controlar este sistema directamente desde su teléfono u otro dispositivo en línea.


Resumen

Internet ha cambiado significativamente desde sus inicios y ciertamente seguirá evolucionando en el futuro. Con el flujo masivo de datos disponible, los sitios y las aplicaciones podrán migrar a una red que ofrezca experiencias mejoradas para los usuarios de todo el mundo. Aunque la generación Web 3.0 todavía no tiene una definición concreta, las innovaciones asociadas a ella ya se están introduciendo en nuestras vidas. Tenemos una idea aproximada de cómo serán las tecnologías futuras y la creación de la Web 3.0 será la etapa más importante en su desarrollo.