Las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos cayeron un 2,5% intermensual en junio, la primera caída desde febrero de este año, pero aún así aumentaron un 23,8% interanual, lo que indica que el mercado de viviendas nuevas sigue siendo relativamente fuerte. Los precios de las viviendas nuevas se mantienen muy por encima de los niveles anteriores a la COVID-19, mientras que los precios de las viviendas usadas están cerca de máximos históricos. Si bien el aumento de las tasas hipotecarias y un repunte de los precios de las viviendas pueden retrasar la recuperación, en general el mercado inmobiliario estadounidense continúa estable. Los analistas creen que los compradores se han adaptado gradualmente a la nueva normalidad de altas tasas de interés. ¿Cuál cree que será la tendencia futura del mercado inmobiliario estadounidense? ¡Bienvenido a compartir tus opiniones en el área de comentarios! Riesgo de mercado, la inversión debe ser cautelosa.