Poco después de que Estados Unidos publicara sus datos del IPC (índice de precios al consumidor) de junio, el valor de Bitcoin aumentó en varios cientos de dólares. Se observó que todo el Índice de Precios al Consumidor y el IPC subyacente fueron inferiores a lo esperado, especialmente por la disminución del coste del combustible y de los vehículos usados. Esto provocó una rápida fluctuación en Bitcoin y alcanzó el nivel de 31.000 dólares en poco tiempo. Sin embargo, más tarde el valor de la criptomoneda volvió a su nivel inicial.