Según Foresight News, la diversificación siempre ha sido una estrategia clave para reducir el riesgo y aumentar la rentabilidad en un mundo de inversiones en rápida evolución. Con la aparición de las criptomonedas, en particular Bitcoin, los inversores han encontrado una nueva clase de activos para incluir en sus carteras. Este artículo profundiza en el impacto de incorporar Bitcoin en las carteras tradicionales de acciones y bonos 60/40.

Al analizar varios indicadores digitales, exploramos cómo los diferentes niveles de asignación de Bitcoin afectan el rendimiento general, el riesgo y la tasa de rendimiento de la cartera. Desde aumentar gradualmente posiciones hasta incorporar grandes cantidades a la cartera, revelamos la sutil relación entre riesgo y retorno en el contexto de la inversión en Bitcoin.

La columna situada más a la izquierda en la figura siguiente muestra la situación cuando no se asigna ningún Bitcoin en la cartera, y las siguientes columnas muestran lo que sucede cuando las tenencias de Bitcoin aumentan gradualmente (hasta un 10%). Estas líneas no representan cambios a lo largo del tiempo, sino más bien la cantidad de Bitcoin que posee. Curiosamente, desde una perspectiva histórica, cuanto más Bitcoin asigne, mayor será la tasa de retorno.

Aunque añadir Bitcoin a una cartera de acciones y bonos 60/40 aumenta los rendimientos acumulativos, existe un problema: también puede aumentar la incertidumbre y el riesgo. La Figura 2 muestra el cambio en la volatilidad después de la asignación de Bitcoin. Si bien el riesgo aumenta, no es un aumento lineal. En cambio, hay una curvatura en la línea. Esto significa que si sólo agrega una pequeña cantidad de Bitcoin, como entre 0,5% y 2%, no aumentará demasiado su riesgo de inversión. Sin embargo, a medida que agrega más Bitcoin, las cosas pueden volverse impredecibles rápidamente.

En la Figura 3, combinamos la información de la Figura 1 para examinar el índice de Sharpe de la cartera. La forma del gráfico es muy interesante: al principio aumenta rápidamente y luego se estabiliza a medida que se invierte más Bitcoin. Este gráfico indica que cuando agrega algo de Bitcoin a su inversión, generalmente significa que obtendrá más retornos para compensar el riesgo que asume. Sin embargo, no hay almuerzo gratis: una vez que comienzas a agregar más y más Bitcoin, especialmente después de aproximadamente el 5% de la inversión total, el aumento del riesgo se vuelve más evidente que los beneficios. Por lo tanto, asignar una pequeña cantidad de Bitcoin puede ayudar, pero más allá de cierto punto, el costo de asignar más Bitcoin supone un aumento significativo del riesgo. Según los rendimientos históricos y la optimización de la varianza media, la proporción óptima de Bitcoin para agregar a la cartera está entre el 3% y el 5%.

En conclusión, explorar Bitcoin como parte de una cartera de inversiones diversificada revela el delicado equilibrio entre riesgo y rendimiento. Los resultados presentados a través de diversos datos enfatizan el potencial de aumentar los rendimientos acumulados mediante el aumento estratégico de las tenencias de Bitcoin, acompañado de un aumento de la volatilidad. Según datos históricos y optimización de varianza media, la mejor estrategia es asignar del 3% al 5% de la inversión total a Bitcoin.