El juez John Dorsey aprobó el plan de quiebra de FTX después de una larga sesión judicial el lunes. Esto acerca a la empresa de intercambio de criptomonedas que colapsó a cerrar sus operaciones, un hito importante en su proceso legal en curso. El juez describió el plan como un "caso modelo" para manejar una quiebra tan compleja.

El plan, que obtuvo un fuerte apoyo de los acreedores, fue presentado al Tribunal de Quiebras de Delaware a principios de este año. Propone distribuir fondos en función del valor de los criptoactivos en noviembre de 2022. Sin embargo, hubo un acalorado debate sobre si distribuir los fondos en efectivo o en criptomonedas. Muchos antiguos clientes querían pagos en especie en forma de monedas digitales en lugar de efectivo.

Durante la audiencia del lunes, un representante de Alvarez & Marsal, Steven Coverick, dijo que FTX simplemente “nunca tuvo las criptomonedas” para hacer estas distribuciones. Explicó que el patrimonio sí exploró formas de devolver las criptomonedas a los clientes, pero los costos habrían reducido la cantidad total recuperada.

Según se informa, el patrimonio de FTX debe a los acreedores alrededor de 11 mil millones de dólares, pero ha recuperado entre 14.500 y 16.300 millones de dólares en activos en efectivo. Si bien algunos abogaron por la devolución de las criptomonedas, Coverick señaló que "haría subir" el mercado y haría que su ejecución fuera costosa.

El plan aprobado no descarta por completo los pagos en monedas estables, que se consideran una opción más práctica. Según un expediente judicial presentado en mayo, el 98% de los acreedores no gubernamentales recibirán al menos el 118% de sus créditos en efectivo en los dos meses siguientes a la implementación del plan.

La audiencia es solo otro capítulo del drama legal de FTX, que comenzó en noviembre de 2022. Desde entonces, el exdirector ejecutivo Sam Bankman-Fried ha sido juzgado y declarado culpable, recibiendo una sentencia de 25 años de prisión. La exdirectora ejecutiva de Alameda, Caroline Ellison, recibió una sentencia de dos años, mientras que Ryan Salame se enfrenta a siete años y medio. Otros ejecutivos, Nishad Singh y Gary Wang, que testificaron en el juicio de Bankman-Fried, esperan la sentencia el próximo mes.

El fallo marca un paso importante para resolver las consecuencias del colapso de FTX. A medida que la empresa se va cerrando, el plan garantiza cierta rentabilidad para los acreedores, pero la controversia en torno al método de distribución sigue sin resolverse para algunos antiguos clientes.