Un residente de Nueva York, William Koo Ichioka, ha sido multado con una asombrosa suma de 36 millones de dólares después de que un tribunal federal lo declarara culpable de una estafa con criptomonedas. El tribunal dictaminó que Ichioka prometió a sus víctimas importantes ganancias, pero en cambio utilizó su dinero para financiar su propio y lujoso estilo de vida. La decisión se anunció el 20 de septiembre en un comunicado de la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC).
El juez del Tribunal de Distrito de Estados Unidos, Vince Chhabria, ordenó a Ichioka pagar 31 millones de dólares en concepto de indemnización a las víctimas de su plan fraudulento. Además, Ichioka ha recibido una sanción monetaria civil de 5 millones de dólares, lo que eleva el total a 36 millones de dólares.
Una promesa de altos rendimientos se vuelve amarga
La operación fraudulenta comenzó en 2018, cuando Ichioka solicitó fondos a los inversores, prometiéndoles rendimientos de hasta el 10 % cada 30 días hábiles. Según la CFTC, si bien Ichioka invirtió parte de los fondos en los mercados de divisas y criptomonedas como había prometido, también mezcló el dinero de los inversores con el suyo propio.
Esta mezcla de fondos le permitió gastar una parte importante en lujos personales, incluidas joyas costosas, relojes y vehículos de alta gama, además de cubrir el alquiler de su residencia.
Esta reciente sentencia se produce tras una orden de consentimiento que se dictó en agosto de 2023, que prohibía permanentemente a Ichioka operar en cualquier mercado regulado por la CFTC o registrarse en la comisión. A pesar de estas sanciones, el daño causado por su estafa de criptomonedas persiste, y las víctimas deben recuperar millones de dólares en pérdidas.
Una ofensiva más amplia contra las estafas con criptomonedas
El caso de Ichioka es solo uno de los muchos casos relacionados con promesas falsas de altos rendimientos en el espacio de las criptomonedas que han sido objeto de escrutinio regulatorio. A principios de este año, en mayo, el Departamento de Justicia (DOJ) acusó al influencer de criptomonedas Thomas John Sfraga de fraude electrónico después de garantizar falsamente a los inversores rendimientos de hasta el 60% en tres meses.
De manera similar, en febrero, Brian Sewell, un instructor de comercio de criptomonedas, fue acusado por la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de engañar a sus estudiantes para que invirtieran 1,2 millones de dólares en un fondo de cobertura que prometía ganancias poco realistas.
El aumento de los casos de fraude con criptomonedas pone de relieve una creciente preocupación entre los reguladores. Para combatir estos esquemas, la CFTC ha intensificado sus esfuerzos para educar al público sobre las estafas criptográficas más comunes en el espacio de los activos digitales. Estas iniciativas se centran en generar conciencia sobre actividades fraudulentas como el "matadero de cerdos", una estafa criptográfica que recientemente ha visto un aumento en el número de víctimas.
Un hombre de Nueva York recibe una multa de 36 millones de dólares por una estafa de criptomonedas que prometía grandes beneficios apareció por primera vez en TheCoinrise.com.