En una declaración reciente en X (anteriormente Twitter), el abogado pro-XRP John E Deaton afirmó que el token XRP había perdido casi tres años de adopción en los Estados Unidos. Este revés se atribuye a la demanda de la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) contra Ripple, presentada en diciembre de 2020. Las declaraciones de Deaton destacan el impacto de las acciones de la SEC en Ripple y el token XRP.

Coinbase, una importante plataforma de intercambio de criptomonedas, adquirió recientemente una participación minoritaria en Circle, el emisor de USD Coin (USDC). Brad Garlinghouse, director ejecutivo de Ripple, hizo una declaración en apoyo de esta medida, con el objetivo de "desbloquear utilidades adicionales y hacer crecer el ecosistema de USDC". Deaton comentó sobre el potencial de Ripple y XRP para una adopción generalizada en los pagos transfronterizos. Señaló que plataformas como Coinbase podrían haber mostrado interés en Ripple sin la demanda de la SEC.

Deaton señaló que antes de la demanda, Coinbase era un importante defensor de XRP, la moneda que ahora está fuera de la lista. Reveló que Coinbase se había puesto en contacto con la SEC para confirmar que XRP tenía prohibido cotizar en la bolsa antes de incluirla en la lista. En una reunión de enero de 2019 con la SEC, Coinbase declaró que había evaluado a XRP de acuerdo con el estricto marco regulatorio de la SEC para activos digitales. Este marco había sido elogiado previamente por un miembro de alto rango del personal de la SEC.

En febrero de 2019, Coinbase agregó soporte para el token XRP después de que la SEC no objetara la solicitud de inclusión en la lista. Además, MoneyGram, el principal socio de remesas de Ripple y competidor, reveló sus planes para XRP en una presentación ante la SEC. La SEC tampoco planteó ningún problema a MoneyGram.

Deaton enfatizó que “MoneyGram también determinó, al igual que los abogados de Coinbase y al igual que los abogados de cumplimiento de la SEC en junio de 2018, que XRP NO era un valor”. Sin embargo, en diciembre de 2020, la SEC inició una demanda contra Ripple, a pesar de los esfuerzos de los socios de Ripple.

El abogado que defiende a XRP argumentó que la demanda contra Ripple representaba una amenaza. Afirmó que “todas las pruebas descubiertas durante los últimos tres años demuestran que es cierto”. Deaton concluyó que el litigio había afectado negativamente a la aceptación de XRP, a pesar de que Ripple seguía teniendo un rendimiento excepcional fuera de los EE. UU.

La demanda de la SEC contra Ripple ha tenido consecuencias de gran alcance para el token XRP y su adopción en los Estados Unidos. A pesar de los esfuerzos de los socios de Ripple y el apoyo previo de exchanges como Coinbase, la demanda ha obstaculizado el crecimiento de XRP. Los comentarios de Deaton subrayan los desafíos que Ripple y el token XRP enfrentaron a raíz de las acciones de la SEC.

Mientras Ripple continúa su camino por el panorama legal, el futuro de XRP sigue siendo incierto. El impacto de la demanda en la aceptación y adopción de XRP probablemente seguirá siendo un tema de discusión dentro de la comunidad de criptomonedas.